Se compueban niveles alarmantes de contaminación en La Oroya y Concepción

En la primera investigación independiente realizada sobre contaminación por metales tóxicos y su impacto en la salud humana en La Oroya, Perú, los Investigadores de la Facultad de Salud Pública de la Universidad de Saint Louis, Missouri, Estados Unidos han encontrado niveles sorprendentemente elevados de contaminación.

La Oroya es el pueblo donde se ubica una fábrica de fundición metalúrgica operada por Doe Run, compañía estadounidense perteneciente al grupo Renco.

El estudio, solicitado por el Arzobispo de Huancayo, fue aprobado por el Ministerio de Salud del Perú y por el Comité de ética de la Universidad de Saint Louis (USL), y fue ejecutado en agosto por un equipo de investigadores de la USL, médicos, laboratoristas y observadores internacionales. Las muestras biológicas fueron analizadas en el Centro de Prevención y Control de Enfermedades – CDC de Atlanta.

Fernando Serrano, investigador principal del estudio, indicó que: ” desde una perspectiva de salud pública, los niveles de plomo, de antimonio, cadmio y de varios otros metales encontrados en La Oroya, son extremadamente altos.”

El estudio confirmó los niveles altos de plomo en los niños y niñas de La Oroya.

Pero, además se encontró un nivel considerable de antimonio en la población de La Oroya, 30 veces más alto al de la población estadounidense. Está demostrado que niveles elevados de antimonio causan enfermedades cardíacas y pulmonares, y pueden estar asociados a defectos genéticos y formativos, al igual que a cáncer del pulmón.

Por otro lado, según el referido estudio, la población de La Oroya registra niveles de cadmio que superan más de seis veces el promedio encontrado en la población norteamericana. El cadmio, un subproducto del proceso de fundición, es un metal pesado que según estudios previos, está asociado al cáncer de pulmón y de próstata, y a insuficiencias y enfermedades renales.

Los investigadores se sorprendieron, asimismo, al encontrar niveles altos de ciertas sustancias tóxicas en Concepción, Perú, ciudad conocida como la capital ecológica del Valle del Río Mantaro, ubicada a unos 100 kilómetros del pueblo de La Oroya. La población de Concepción presenta niveles de cadmio que superan en un 50 por ciento el promedio encontrado en los EEUU. El Valle del Mantaro es productor de un porcentaje significativo de las hortalizas, granos y productos lácteos que consumen los nueve millones de habitantes de Lima.

La Iglesia Católica, junto con el gobierno regional y más de 60 municipalidades, asociaciones profesionales, universidades, organizaciones sindicales y otras instituciones de la sociedad civil peruana, ha iniciado un esfuerzo amplio, no violento, alrededor de la Mesa de Diálogo Regional, que busca encontrar solución al problema de contaminación ambiental en La Oroya y el valle del Río Mantaro. El estudio de la USL brinda información independiente que permitirá a autoridades locales y regionales tomar decisiones informadas, y a la vez, representa un primer paso en el camino a seguir para este grupo.

El Director del Proyecto, Fernando Serrano, comenta que: “los resultados de este estudio indican que hay necesidad de una acción urgente en La Oroya, y de un esfuerzo concertado en toda la región, a fin de aplicar políticas adecuadas a corto, mediano y largo plazo, haciendo un énfasis especial a nivel de prevención.”

Este estudio llega en un momento crítico para la población de La Oroya, dado que la Compañía Doe Run ha anunciado públicamente su intención de posponer la implementación de su Plan de Adecuación y Manejo Ambiental (PAMA) que se había comprometido a completar para el año 2007. El impacto potencial de esta ampliación de plazo sobre la salud de la población de La Oroya es un asunto de particular preocupación para muchos.

Para mayor información, contactar: Fernando Oyarzábal (51-1- 97167568 o 98040852)